Twitter arde con la última selectividad
española o prueba de acceso a la universidad. Platón, Nietzche y el
teatro español desde 1939, entre otras materias, para los últimos madrileños
que se someterán a esta prueba para acceder a los estudios superiores. Los que
lo hagan el año que viene tendrán una reválida todavía por definir. Que si era
fácil, que si era difícil… los chavales de comunidades que aún no han empezado
el examen tiemblan…
Pero donde de verdad están como una moto con la
selectividad es en China. Sí, en China. Si aquí son algo más de 200.000 los
alumnos que entrarán en el bombo, allí rozan los diez millones. Y si aquí es
importante acceder a la universidad, en el país de Confucio es más que
importante: absolutamente determinante. Tanto es así que las pruebas son todo
un acontecimiento hipertutelado por el gobierno. Desde el año pasado vigilan a los alumnos con drones y desde este año, además, copiar
en el gaokao (así se llama la selectividad china) es considerado un crimen, y
como tal viene recogido en el código penal de la república popular, con un
castigo que puede ser de hasta siete años de cárcel. Esto sí es presión,
chicos, jóvenes estudiantes españoles de la PAU16. Menos quejarse y más
estudiar, a pensar en los chinos. Al fin y al cabo, con ellos tendrán que
competir los nuestros, en este mundo cada vez más globalizado.
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